Con esta oración para el amor de San Judas Tadeo tú puedes pedir una gracia para atraer hacia ti a la persona que amas o para que regrese aquella persona que te ha abandonado.
Oración a San Judas Tadeo
San Judas Tadeo, apóstol escogido por Cristo,
yo te saludo y felicito por la fidelidad y el amor
con que cumpliste tu misión.
Llamado y enviado por Jesús,
eres una de las doce columnas que sostienen
la verdadera Iglesia fundada por Cristo.
Muchas personas, imitando tu ejemplo
y ayudadas por esta oración,
encuentran el camino hacia el Padre,
abren el corazón a los hermanos
y descubren fuerzas para vencer el pecado
y vencer todo el mal.
Quiero imitarte, comprometiéndome
con Cristo y con su Iglesia,
por una decidida conversión a Dios y al prójimo,
especialmente el más pobre.
Y así convertir la misión de vivir
y anunciar el Evangelio,
como miembro activo de mi comunidad.
Así que espero alcanzar de Dios la gracia que imploro
confiando en tu poderosa intercesión.
Estoy viviendo un período muy difícil.
Necesito de tu ayuda,
porque estoy desesperado.
San Judas, apreciado amigo de Jesús,
invocado en el mundo entero,
como el abogado de los casos desesperados,
mira por mí en este momento.
Yo te imploro que me ayudes,
que me traigas alivio,
ya que no tengo más fuerzas para soportar
cualquier solución desaparecida por completo.
Estoy afligido,
Necesito de tu ayuda en el cielo.
Con gran confianza,
tengo la fe y la certeza de que,
desaparecerán mis tribulaciones por completo.
Como devoto de tu sabiduría,
prometo a cambio ofrecer todo mi corazón, sin egoísmo.
San Judas Tadeo, ruega por mi corazón.
Amén.
El primer día, San Judas, poderoso en las curas, acompañó a Jesús por los pueblos de Israel y fue testigo de su poder de curación. Tal vez vio a Jesús en la curación de los diez leprosos, curar a una mujer que sufría hemorragias o resucitar a los muertos.
Cuando el hombre sin visión exclamó: «Jesús, hijo de Dios. Ten piedad de mí», San Judas probablemente oyó a Jesús decir: «Recupera tu vista. Tu fe te sanó». San Judas, al ser uno de los discípulos de Jesús, recibió autoridad y poder con el fin de proclamar el Reino de Dios.
San Judas entendió que el deseo del Señor era curar a la gente. Luego de la ascensión de Jesús, su discípulo San Judas y los otros apóstoles fueron a llevar la palabra de Jesús a todas partes con la ayuda del Señor, quien apoyaba su mensaje con signos y milagros que los acompañaban.
Cuando somos confiados e insistentes en nuestra oración, damos permiso para que nuestra oración modifique nuestras vidas. Ofrecemos nuestros corazones al espíritu de Dios, albergando las pruebas constantes que Dios nos envía y generosamente comprometiéndonos a imitar a Jesús.
Te invito a que veas la historia sobre mi y como pude en poco tiempo conseguir que mi pareja volviera y de igual manera como la guía de Hechizos de Amor me ayudo a conseguir todo lo que una vez había perdido.